EL SUCONSCIENTE Y LA SUGESTIÓN

10.07.2013 16:31

El subconsciente y la sugestión

El subconsciente es una herramienta que podemos usar a nuestro favor si sabemos cómo manejarla, pero que se puede volver en contra si no la programamos de la manera correcta. Uno de los problemas que aquejan a muchas personas es la sugestión, porque no le permite desenvolverse en el medio que la rodea. En esta nota, te contaré más sobre ello.

El subconsciente y la sugestión: qué saber

La sugestión tiene un inmenso poder en todos los seres humanos y trabaja de diferentes maneras en nuestra mente. En el caso de la consciente, su función principal es la de proteger a la subconsciente de que no ingresen a su recinto impresiones o imágenes falsas. Esta última no puede razonar ni pensar por si misma porque no cuenta con esa habilidad, a diferencia del consciente.

La sugestión puede hacer que una persona no actue correctamente, que se paralice ante ciertas situaciones o que tome decisiones equivocadas.

Por ejemplo, si una persona está organizando un viaje al extranjero en el cuál debe viajar el avión y ve en las noticias que uno ha caído, es más que probable que el día del vuelo tenga mucho miedo y hasta se ve en la situación de cancelar sus vacaciones.

Lo mismo puede ocurrir si alguien cuenta que lo han robado en el autobús cuando estaba muy lleno. En el próximo viaje en ese transporte en el que viajen muchos pasajeros podrás sentir miedo al recordar lo que te han contado, por más de que hayan pasado semanas.

Esto pasa a diario por los mensajes que se le brindan al subconsciente, de manera directa o indirecta y eso es lo que hay que evitar.

La sugestión en relación al subconsciente

La definición de “sugestión” del diccionario dice que es el acto de introducir en la mente de otra persona algo para que ésta reaccione de una forma determinada, siendo aceptada y llevada a cabo.
Pero, para poder contrarrestar este efecto, debes tener en cuenta que nadie ni nada puede imponer algo en el subconsciente de otro si éste no se lo permite, o mejor dicho, si la mente consciente no lo deja entrar en los aposentos del que tiene a su cuidado.

Es decir que el consciente tiene dos posibilidades: aceptar lo que se escucha y convertirlo en sugestión para que el subconsciente lo tome y se maneje según sus ideas, o no permitir el ingreso de esa información para que no llegue a “oídos” de el subconsciente, haciéndolo más inmune.

Esto no significa dejar de escuchar a las personas o las noticias, sino, saber que existen datos e ideas que pueden afectar nuestro subconsciente, esas son las que no debemos dejar que ingresen a nuestra mente.