De aquella nube negra y pesada brotó una gota, como cualquier otra gota comenzó su caída. A los pocos metros ella tomó conciencia de si y se vio en la caída.

Pensó para sí: -"Vaya, así que esto es caer!!"

Y se vio a sí misma. Volteó a ver a su alrededor y miró a otras gotas como ella en su caída frenética, las observó como semejantes a ella y se puso feliz. 

Y comenzó a sentir el viento en su cuerpo, disfrutaba de esa carrera y de cómo su cuerpo prácticamente volaba.

Abrió los ojos para echar otro vistazo y vio a otras semejantes suyas pero eran de un tamaño más pequeño que ella. Y las vio con curiosidad, extrañada de su pequeñez.

Pero esa curiosidad su fue convirtiendo en vanidad. Ella sentía que como era más grande por lo tanto ella sería superior, mejor que las otras gotas más pequeñas. Se sintió superior y veía con desdén a las otras.

De repente una ráfaga de viento la golpeó llevándola fuera de su ruta. Algo asustada se calmó cuando vio que ella estaba bien, pero ahora miró a su alrededor y miró a otras semejantes a ella y se dio cuenta que no eran transparentes, tenían un aspecto más turbio, como sucias.

Al ver que eran diferentes y no tan transparentes como ella, las notó inferiores y se alegró más. Estaba muy orgullosa, con mucha vanidad y egoísmo.

Otra ráfaga de viento la tomó de sorpresa y la volvió a llevarla lejos. Cuando se recuperó se vio rodeada de enormes gotas, eran como ella pero eran de un tamaño magnífico. Al verse tan pequeña y simple se entristeció, se sintió pequeña, débil y sin gracia.

De nuevo otro golpe de viento le llevó lejos. Ya enojada por el viento que la llevaba de aquí para allá, se vio rodeada por otras gotas, pero estas tenían un aspecto más puro, más cristalinas. Ella se comparó y se vio menos pura, ya que ellas eran como de
cristal. La tristeza y desilusión la agobió más.

Su caída era pesada, estaba destrozada pensaba para si ¿qué sentido tiene el caer?, ¿para qué sirvo yo?, ¿de qué sirve ser gota si no soy perfecta?... y así más preguntas por el estilo.

Más adelante una gota se le acercó y le preguntó:

-"¿Triste?" 

Ella sin verle le dijo: -"Sí"

De nuevo el visitante dijo: -"Te he visto cómo estás, vaya si que estás triste, dime, ¿qué te pasa?"

-"¿Qué sentido tiene caer?"- le respondió con otra pregunta nuestra amiguita.

La gota visitante vió cómo estaba y dijo:

-"Vaya, no sabes quién eres, eres una gota, pero eres una gota de agua, de vida, de esperanza, de algo tan grande que no sabes.." 

Aquella respuesta inquietó a la nuestra amiga:

-"Vaya, si que eres raro, de dónde vienes?"

Con una sonrisa responde:

-"Soy una gota ya vieja, he caído y vuelto a caer muchas veces, he completado el ciclo ¡uufff! ya perdí la cuenta y créeme es fascinante y maravilloso cada oportunidad de caer"

Nuestra amiga quedó admirada.

Y continuó hablando el visitante:

-"Somos una hermosa creación de Dios, venimos de una nube y caemos a la tierra para llevar nuestra esencia para que la vida sea allá abajo, es parte de nuestra misión el caer. El sitio donde caes no importa, de veras, ya que yo he caído en sitios hermosos y lindos, pero en otras ocasiones he caído en lugares horribles y feos; pero aún así cumples tu deber, además ya caída, nuestra esencia se hunde con otras gotas y nuestra conciencia se expande.. guau! eso es hermoso, cuando te unes a las demás y nos formamos en un sólo ser..."


Su oyente lo interrumpe:

-"Pero yo quiero caer en un campo hermoso, pero el viento tan feo y cruel me azota y me saca de mi ruta, no sé dónde voy a caer"

Dibujando otra sonrisa el visitante le dice:

-"Yo he aprendido que no importa dónde caigas, el viento a pesar de lo duro, te lleva a donde tú haces falta... es en serio lo que te digo, llegues a dónde llegues siempre será el sitio indicado para ti, allí tu llevarás tu esencia y lo harás bien... créeme, no maldigas al viento que te jala y empuja, él sabe a dónde llevarte, él es parte del plan".

Nuestra gota le dijo:

-"Pero soy una pequeña gota, he visto a otras más grandes y más limpias que yo, además he visto gotas sucias y no tan puras..."


La gota vieja sonriendo le dice:

-"No te fijes en el tamaño, en el ambiente hay rocío, no lo percibes porque la velocidad a que vamos no lo permite ver, pero de ese rocío tú te alimentas y mírate, estás más grande que cuando comenzaste" 

Nuestra amiga se vio y si, era cierto, estaba más grande.

Y continuó su plática:

-"Las gotas sucias que viste, son así porque estuvieron el un sitio equivocado y por que el ambiente estaba contaminado, no son así porque ellas lo hubieran querido, sino porque ellas así les tocó, pero su esencia es tan limpia y pura como tú o como yo, pero ellas cuando lleguen abajo dejarán esa suciedad y serán de nuevo claras"

Terminado de decir esto, una ráfaga de viento las separó bruscamente, aún así el visitante le dijo gritando:

-"No te preocupes, ten fe"

Nuestra gota algo asustada, pronto se sintió más relajada, se puso a pensar en todo lo que le dijeron y supo que era verdad, no sabía porqué pero muy por dentro sabía que era cierto.

Se sintió feliz, y permitió disfrutar de nuevo el viento; abrió los ojos y supo que estaba cerca de caer. Y vio a un grupo de gotas que estaba asustadas y 
temerosas, se acercó a ellas y les dijo todo lo que ella había aprendido. Le dio consuelo y certeza a esas otras gotitas.

Se sentía plena, había compartido lo poco que sabía y sintió que hizo lo correcto. Miró de nuevo abajo y supo que estaba cerca.

Se preguntó dónde caería, en un campo como ella quería?, en una ciudad?, en un basurero?... en... qué importa!!! dijo ella, llegue a donde llegue estaré bien.

Cuando por fin supo que estaba próxima a caer, cerró sus ojos y se entregó....

Cayó en un hermoso lago, enclavado en las montañas más bellas.

Cuando llegó al lago, su ser al unirse a las demás, se expandió casi al infinito... su yo casi desapareció... hasta que de nuevo suba a los cielos....

Somos como esas gotas de agua, espero les haya gustado, de mi inspiración. ENRIQUE SALAZAR ANDRADE